En esta ocasión, nuestro cliente nos solicitaba un tratamiento para garantizar la estanqueidad de un antepecho de ladrillo sobre el que se iba a montar una carpintería.
Revestimiento con mortero de reparación estructural
En primer lugar, se debe tener en cuenta que para que una impermeabilización funcione correctamente y con garantías de durabilidad, el soporte sobre el que se aplique debe ser firme y continuo.
Es un error muy común pensar que se puede aplicar una impermeabilización (sea la que sea) sobre un cerramiento de ladrillo sin una capa previa de regularización.
Por eso, en este caso, se le indicó al cliente que el antepecho debía quedar revestido con un mortero de reparación estructural, consiguiendo así un soporte apto para poder impermeabilizar.
Membrana acrílica de alta elasticidad
En este caso se optó por una membrana acrílica de alta elasticidad que se puede aplicar directamente sobre el mortero de reparación sin imprimación.
Se aplica con rodillo y en varias manos, dejando un acabado continuo, sin juntas y que se adapta perfectamente a todas las formas del soporte.
Refuerzo con elemento de transición
En las zonas con encuentros a 90º y/o puntos singulares se debe reforzar siempre con algún elemento de transición, como, en este ejemplo, una banda de butilo autoadhesiva con geotextil.
Ahora que conoces nuestra obra destacada de febrero y el funcionamiento de Lemara, no dudes en contactar con nosotros.