La obra del mes de junio se trata de una reparación de solera, con la peculiaridad de estar a una temperatura de trabajo de -20 °C.
Como se puede ver en la fotografía, el estado actual de la misma en la zona de paso es de un deterioro avanzado.
DETERIORO DE SOLERA
Este tipo de patologías van empeorando en el tiempo debido al paso de las ruedas de las carretillas, y a su vez suponen un riesgo en el manejo de las mismas por el pequeño tamaño que suelen tener dichas ruedas.
Para hacer una buena reparación y garantizar su durabilidad es necesario ejecutar cortes limpios que permitan una buena transición entre la solera original y la reparación.
APLICACIÓN DE ESPESOR MÍNIMO DE MORTERO
Del mismo modo, es necesario garantizar un espesor mínimo para conseguir la correcta transmisión de esfuerzos, aunque dicho espesor siempre vendrá definido por el material a utilizar.
REPARACIÓN COMPACTA RÁPIDA Y DE ALTA RESISTENCIA
En nuestro caso, al estar a -20 °C no es posible el uso de morteros de cemento con agua, por lo tanto, se ha optado por un mortero de polímero híbrido (acrilato) que permite trabajar a bajas temperaturas.
El resultado es una reparación compacta y de alta resistencia que adquiere gran resistencia a las pocas horas, incluso a tan bajas temperaturas.
Ahora que te hemos contado de nuestra obra de junio y sobre cómo funcionamos en Lemara, no dudes en contactar con nosotros si quieres saber más.
