Dentro de las obras de fábrica, una de las patologías más habituales que nos podemos encontrar, independiente del material del que se haya ejecutado el muro (mampuestos, sillería, ladrillos…), son las fisuras y grietas.
Hablamos de fisura cuando la apertura es fundamentalmente superficial y no afecta a la sección del muro. En cambio, la grieta atraviesa todo el espesor del mismo. En el primer caso el problema es estético y de durabilidad. En el segundo, puede llegar a ser un problema estructural.
Las causas más habituales para la presencia de este tipo de patologías en las obras de mampostería son las siguientes:
- Uso de materiales inadecuados
- Errores de diseño
- Errores de ejecución
- Tensiones diferenciales producidas por los cambios de temperatura
- Cambios de humedad
- Deformaciones o asentamientos de la cimentación
- Sobrecargas excesivas
Reparaciones en muros de mampostería y de sillería
En LEMARA RESTAURACIONES, somos especialistas en la reparación de muros de mampostería y de sillería de edificios históricos, llevando a cabo diferentes sistemas de ejecución para garantizar la durabilidad, así como la recuperación estética de los mismo.
Siempre que debemos acometer la reparación de un muro de piedra, es necesario conocer cuáles son las patologías y cuál es su origen. El primer paso, es analizar la causa del problema para eliminarla, y posteriormente la reparación en sí misma. Si no se plantea este trabajo siguiendo este orden, lo más probable es que las grietas vuelvan a aparecer.
Como ejemplo, supongamos una construcción antigua, con muros de fábrica de mampostería y cimentación de la misma naturaleza. Supongamos que esta última se ha descalzado al lavarse el terreno por una corriente de agua subterránea.
En este caso, aparecerán una serie de grietas en la fábrica, que, si no recalzamos previamente la cimentación, seguirán aumentando, pudiendo llegar incluso al colapso del edificio. Por este motivo, en este caso, el primer paso sería recalzar las zapatas y/o estabilizar el terreno si fuese necesario, y posteriormente se procedería a la reparación de los muros.
Métodos de reparación en muros de piedra
Dentro de los procedimientos de reparación de fisuras en muros de piedra, pasamos a describir los tres más habituales:
- Reparación por sustitución
- Reparación por grapado
- Reparación por inyección
Reparación por sustitución
Se trata de retirar las piezas afectadas y sustituirlas por otras de idénticas características, tanto de composición como resistentes. Cuando el muro está formado por piedras talladas, o sillares, (muro de sillería) la ejecución de la reparación se complica, ya que requiere de mano de obra especializada de cantería, además de la dificultad de la sustitución de piezas de peso considerable. En este caso, sería recomendable otro sistema de reparación.
En cambio, para muros de fábrica de ladrillo o bien de mampostería (que se solían hacer con piedra de la propia zona de la obra) es una opción muy efectiva.
Reparación mediante cosido o grapado
Este procedimiento de reparación mediante cosido o grapado, se trata de colocar un elemento que una las dos partes de la grieta, de modo que se estabilice y se fije. Para ello se utilizan elementos metálicos, aunque actualmente se tiene más a materiales sintéticos, como fibra de vidrio o de carbono, por sus buenas características, tanto de resistencia como de durabilidad.
La colocación de las grapas se ejecuta realizando unas rozas en la piedra y colocando el refuerzo en el interior de las rozas, anclándose con adhesivos especiales o con morteros. Es conveniente hacer las rozas al tresbolillo, de modo que no queden centradas a la grieta, para que no debilitemos en exceso la zona de los bordes de la grieta.
Este procedimiento es muy efectivo para la reparación de grietas en muros de ladrillo o bloque, en obras de sillería y de fábrica de bloque o de ladrillo, pero no para mampostería, ya que la irregularidad de la misma hace poco efectiva esta solución.
Reparación mediante inyección
En este caso, se trata de rellenar las grietas con productos especiales, que puede ser morteros o bien resinas.
Este procedimiento sólo es efectivo cuando la obra de fábrica es de sillería o de mampostería, es decir con piezas macizas.Se pueden inyectar las juntas, las propias piezas o incluso la parte interior cuanto se trata de muros de varias hojas. También se suelen inyectar las cimentaciones de piedra de las edificaciones antiguas.
Los productos más habituales son las lechadas de cemento, lechadas de cal o bien las resinas epoxi. La selección de cada producto vendrá determinada por las características de cada obra y lo que queramos conseguir con la inyección.